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Estás viendo: La correcta comunicación de los padres de familia y los educadores
Los procesos de enseñanza y aprendizaje son una actividad colaborativa entre la escuela y el hogar. Esta relación puede traer múltiples beneficios al desarrollo de todo alumno. Hoy en día, existen diversos estudios que han intentado vincular el desarrollo de los educandos, con el grado de interacción entre los padres y el colegio, con resultados diversos.(1)
Sin embargo, el impacto emocional que todo niño vive cuando esta relación es de cordialidad y compromiso es positivo, haciendo que este cuente con las herramientas necesarias para un mejor desempeño en áreas físicas, sociales e intelectuales.
Sin duda, saber que todos los adultos involucrados en su formación están alineados en un propósito en común, establece seguridad y un sentido de confianza que permite que los niños potencien su desarrollo afectivo, emocional e intelectual; características esenciales para su crecimiento y desarrollo. Esta relación se logra estableciendo una comunicación asertiva, y creando un vínculo emocional entre el hogar y el espacio educativo.(1)
Cuando el alumno requiere de ciertas condiciones derivadas de un tratamiento médico, o de necesidades relacionadas con la salud, esta comunicación se hace todavía más importante. El personal de la escuela se convierte en aliado, en una perspectiva independiente y, en ocasiones, la única fuente de información de los síntomas o necesidades del niño en el horario en el que los padres no pueden estar de manera cercana. Es él quien tendrá que decidir sobre los riesgos, cuidados, adecuaciones o atenciones especiales que se pudieran requerir; haciendo que estas sean precisas y oportunas para la mejor atención del niño. Esta apertura y confianza, además de ser un aliado en la salud del niño, servirá de vínculo emocional por parte de todos los adultos de su vida. (2)
Existe un antiguo proverbio africano que dice “Se necesita una aldea para criar un niño”.(1) Estas aldeas las construyen las familias con aquellas personas de la sociedad que los podrán apoyar en la labor de educar, cuidar y formar al niño. Solo con la creación de estas aldeas de confianza, es que podremos asegurar las mejores condiciones para los niños del mundo.
El diagnóstico y tratamiento de cualquier enfermedad sólo puede ser realizado por un profesional de la salud calificado.
Fuentes:
No. SSA |
GCMA |
213300201B3030 |
PP-GEN-MEX-0424 |
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